Naturaleza deslumbrante y cultura refinada conviven en perfecta armonía. Así es Austria: un destino donde no tienes que elegir entre aventura y elegancia.

Tierra de grandes compositores como Mozart, Haydn y Strauss, paisajes alpinos y ciudades llenas de historia; Austria es un destino que lo tiene todo. Desde la elegancia imperial de Viena hasta el encanto musical de Salzburgo, pasando por lagos cristalinos como el de Salzkammergut, pueblos de cuento como Hallstadt, el pueblo que inspiró el reino helado de Frozen, y rutas escénicas entre montañas. Durante épocas cálidas se hace imprescindible disfrutar de sus ciudades e increibles cascos históricos y es idóneo para hacer rutas y senderismo por los Alpes austríacos o recorrer el Danubio en bici. Y cuando hace más frío, el país se convierte en un paraíso para los amantes de los deportes de invierno, ya que es uno de los mejores destinos para esquiar de Europa.

Austria es un espectáculo natural que se reinventa con cada estación: con paisajes floridos y cielos despejados en primavera, actividades al aire libre en lagos y montañas en verano, colores vibrantes en otoño y nieve perfecta para el esquí en invierno.